Somos seres espirituales creados por Dios, hechos a su imagen y semejanza, llevamos su esencia dentro de nosotros.
Por muchos milenios la raza humana a permanecido ausente, dormida, de su verdadera esencia divina.
El ser humano cuando llego a este planeta tridimensional, se desconecto de su relación celestial, luego ya aquí el sistema mundial que gobierna, lo programo para que sus pensamientos fueran más materiales.
Se olvidó el humano terrenal que es una entidad multidimensional, eterna, viviendo en un cuerpo humano. Y que a su llegada a este planeta tierra esta, sujeto a vibraciones de baja frecuencia. Pero esa información con la que el ser humano, ya traía de esas dimensiones múltiples, a un tiempo determinado, tendrá que despertar.
Somos seres espirituales que estamos teniendo una experiencia humana, y no como algunos creen, que somos humanos viviendo una experiencia espiritual.
Esto nos permite saber que no somos simples mortales, y al contrario sentirnos orgullosos de nuestra esencia, y que solo venimos a este mundo por un corto tiempo comparado con nuestra naturaleza infinita.
Al hombre, de esta generación le está permitido evolucionar a una nueva dimensión vibratoria, a una nueva realidad, este es el tiempo para que despertemos a nuestra realidad multidimensional, y que nuestro ser interior nos ayude a visualizar la comprensión de otras realidades.
El ser Humano fue programado desde un nivel muy profundo y divino para entrar en un programa de ascensión planetaria individual y colectivamente que será única en el Universo y por lo tanto, distintos seres de otros planos cósmicos estarán atentos a este acontecimiento Universal.
Planos y dimensiones.
El hombre percibe el mundo que le rodea gracias a sus sentidos físicos, la influencia de dicho mundo es quizás lo más importante de su vida. Pero si prestamos un poco de atención observaremos que no todo lo que nos rodea lo registra o percibe nuestros sentidos. Echemos rápidamente una ojeada, al espacio vacío que hay entre el libro y nosotros, ¿qué vemos?, seguramente muchos dirán ¡nada!, sin embargo sabemos que, hoy por hoy, científicamente esto no es cierto en modo alguno.
Entre ese espacio, aparentemente vacío, existe una multitud de formas, más o menos sutiles. Están
las motas de polvo y algunos ácaros,
esta el aire que aunque invisible al ojo, permanentemente presente en la atmósfera. Pero aún hay más, están miles y miles de ondas de radio y televisión, además de millones de conversaciones de teléfonos móviles.
Vaya, el espacio vacío parece muy congestionado de tráfico de ondas. Pero si además queremos profundizar un poco más, seremos conscientes que los átomos que formas la partículas del oxígeno, por ejemplo, vibran o mejor dicho, giran incesantemente dentro de su núcleo, los electrones y los protones alrededor del neutrón, y este movimiento produce una finísima fricción que a su vez produce diversos ultrasonidos, que nuestros oídos son incapaces de percibir.
Si siguiéramos investigando, y profundizando en diferentes dimensiones, muy pronto entraríamos dentro del campo de lo extrasensorial, dónde los pensamientos, las emociones y las fuerzas y vidas invisibles ocuparían su lugar en el tiempo y en el espacio que nos rodea. Miremos atentamente a nuestro alrededor, nada es realmente lo que parece ser, y hay mucho más oculto que no percibimos, que lo que a priori o a simple vista parecería haber.
Conocemos el mundo por medio de nuestros 5 sentidos, y si uno de ellos es defectuoso nuestro conocimiento del mundo también varia.
Estos 5 sentidos todos los conocemos y son:
● LA VISTA: Este sentido nos permite percibir, ver, una determinada gama de vibraciones cromáticas.
● EL OÍDO: Nos permite oír, una limitada frecuencia de decibelios.
● EL TACTO: Relacionado con la sensibilidad de la piel.
● EL GUSTO: Nos pone en relación con una delimitada escala de sabores.
● EL OLFATO: Este sentido está mucho más desarrollado en los animales que en el hombre. Es un sentido poco utilizado en detrimento de los demás, sin embargo cuando lo utilizamos con plena conciencia nos proporciona un campo de experiencias maravilloso.
Nuestros sentidos Físicos, son como ventanas abiertas al mundo exterior, que permite al Morador Interno, vislumbrar una pequeña porción de la " Realidad ". Más allá de esta fracción, encontramos otras "Realidades" más profundas, ya sean químicas, atómicas o Espirituales, de las cuales nuestros 5 sentidos, por sí mismos, nada saben.
Plano Físico.
- El Plano Físico es el mas denso y el más evidente para el ser humano común. Está sujeto a más Leyes que los otros seis superiores, ya que conforme se asciende en niveles (vibración), menor es la presión ejercida por la materia. La composición de su sustancia, es la más grosera y concretizada, siendo por lo tanto el plano inferior de la creación.
- El hombre hace contacto con él a través de sus sentidos físicos: vista, oído, gusto, tacto y olfato, teniendo la mente como agente sintetizador de todos ellos.
Este contacto se alcanzo gracias al enorme esfuerzo realizado por la evolución, para capacitarlo en responder lo mejor posible a los impactos del mundo exterior (físico). El estudio sobre sus innumerables fenómenos, así como de sus variados tipos de vida, no pueden ser desarrolladas aquí, ya que ya han sido suficientemente tratados y desarrollados por nuestros científicos y hombres de ciencias naturales.
- Todos los Planos tienen siete tipos de densidades diferentes llamados normalmente subplanos. El
Plano Físico está compuesto por diversas densidades, siete en total, siendo las tres inferiores conocidas por todos, veamos: la sólida, la líquida y la gaseosa, (el cuarto estado de la materia física es hoy en día un hallazgo de la ciencia, la cual la está estudiando muy incipientemente, se la conoce esotéricamente como energía etérica).
Los Siete subplanos del Plano Físico son:
- El Sólido - El Líquido- El Gaseoso.
- El Etérico - El Superetérico - El Subatómico - El Atómico.
- Antes de nada, debemos recordar que cuanto más elevado es un subplano más rápido es el nivel vibratorio de la materia que le corresponde. La ciencia moderna conoce únicamente cuatro: el Sólido, el Líquido, el Gaseoso y el Plasmático. Más allá de éstos existen otros tres, si bien cabe presuponer la posibilidad de que el plasma conocido por la ciencia abarque también estos últimos estados y haga de hecho referencia a la totalidad de la Región que ocultamente se ha venido denominando eterica.
El Plano Astral:
Entramos aquí a considerar el Sexto Gran Plano del Sistema Solar. En este nivel el Mundo Astral a perece muy diferente al mundo físico, la materia es mucho más sutil que la etérica, y dotada de una especial Vitalidad y Movilidad. Se trata pues de una materia en movimiento incesante, que adopta todas las formas, imaginables, con vertiginosa rapidez, pasando continuamente de una a otra, y refulgiendo con infinidad de ma-tices cromáticos, incluidos muchos colores no conocidos por el ojo físico. La luz solar en el plano astral produce un efecto muy diferente que en el físico.
Existe aquí una luminosidad difusa que no procede de ninguna dirección determinada, siendo la propia materia astral luminosa de por sí, no existiendo en ese nivel la absoluta oscuridad, ni las sombras, y no viéndose afectada por las condiciones atmosféricas del plano físico.
La visión en este Plano es asimismo muy diferente de la física, ya que cada objeto se percibe por todos sus lados a la vez, incluyendo su interior, al igual que su exterior. Igualmente puede contemplarse las partículas que componen la atmósfera, las Auras De Los Seres, y los cuatro Subniveles de la Materia Etérica, además de los colores ultravioletas, infrarrojos y todos cuantos actúan como complementarios de los colores ordinarios a los que nuestra visión común no percibe, por esa razón se la denomina “astral” haciendo referencia a “estrellado” “luminoso”.
- La materia del plano astral actúa como Transmisora y Receptora de los impulsos que ocasionan los movimiento, y permiten el sentimiento, la percepción del placer y el dolor, del agrado y el desagrado, así, como de los DESEOS, las aspiraciones, el AMOR, el odio, y todo tipo de emoción.
Esa es la razón por la cual al Plano Astral también se la conoce como el Plano Emocional o de Deseos. Así, también, todo objeto físico posee materia Astral del grado correspondiente, que actúa como su contraparte a ese nivel, si bien no existe una correlación directa entre las partículas del objeto físico y las de su contraparte astral, que se hallan en continuo movimiento.
En los seres vivos esta contraparte se destruye por disgregación tras la muerte física. En el caso de los objetos inanimados, la contraparte se destruye cuando se destruye el objeto físico. El nivel astral es fluídico y hace posible que un objeto puramente astral pueda ser movido por un ser astral, pero no la contraparte astral de un objeto físico ya que ésta se halla unida indisolublemente a él. Para una persona que es capaz de salir conscientemente con el Cuerpo Astral, llamado también, proyección astral, puede percibir esta realidad con mucha más nitidez y ser consciente, también, de la falta de gravedad y de otras leyes, puramente físicas.
- El Plano Astral esta subdividida a su vez en 7 niveles diferentes, con muchas diferencias entre los inferiores y los superiores.
En los subplanos inferiores encontramos una gran y nublosa existencialidad, es el mundo de las pesadillas, del odio, de los deseos más escalofriantes de la humanidad.
Es el estado relacionado con lo que los cristianos consideran el infierno, un nivel dónde sus habitantes están sujetos a muchas penalidades autogeneradas. Es importante comprender que cada Plano o Subplano están dentro de cada ser humano, y que no hace falta “morir” o dejar el cuerpo físico para experimentar dichos niveles, de hecho son mucha los individuos que por ley de afinidad o correspondencia viven en sus propias vidas subjetivas, dichos subplanos.
El Cielo y el Infierno están dentro del hombre, es su propio bagaje interior, y de él depende subir o bajar de grado espiritual. Los Subplanos Intermedios, son regiones dónde suelen ir los recién “fallecidos”, un plano cordial, dónde los deseos y anhelos humanos suelen materializarse en materia astral, estando sus habi-tantes viviendo en su propio mundo de ilusión particular.
En los niveles Superiores encontramos una profunda Bondad, una luminosidad y ambientes sumamente refinados. El amor es la clave para ir ascendiendo de subplanos y de planos, cuando más se asciende mejor es la claridad y percepción espiritual, y el alma se encuentra más libre, con menos velos ocultadores de la “verdad”. Cuando tratemos el tema de la “muerte” en otro capítulo, profundizaremos un poco más sobre dicho plano, ya que el ser humano, y en este ciclo de manifestación en concreto, es muy afectado por él, siendo todavía y por desgracia un ser muy desequilibrado emocionalmente.
- Los habitantes del Mundo Astral, porque tengamos presente que habitantes o seres de muy diferentes clases existen en todos los planos de la creación, y así como en el plano físico existen innumerables seres vivos, así también en el plano astral y en los demás, existen infinidades de vidas, que viven, evolucionan y se desenvuelven normalmente en su propio habitad.
Los Habitantes astrales se pueden dividir, a groso modo, en dos tipos: Los humanos, y los que no lo son. Y dentro de esta división encontraríamos a los que habitan, propiamente dicho, este plano y los visitantes que esporádicamente lo visitan o realizan alguna labor.
En este plano encontramos a los que recientemente han fallecido, también encontramos a los que durante el sueño dejan el cuerpo físico y vagan por el plano astral dormidos, sin conciencia despierta. También están los Discípulos y Adeptos que a voluntad entran en dicho mundo y de una forma totalmente consciente realizan algún trabajo espiritual o de aprendizaje.
Cualquier individuo puede salir en cuerpo astral, y puede o no estar espiritualmente desarrollado, porque el desenvolvimiento psíquico no va necesariamente unido al progreso espiritual. Por lo tanto, podrá el psíquico ser perfectamente consciente al actuar fuera del cuerpo físico, pero por falta de adiestramiento se expone a tremendos engaños respecto a lo que percibe.
Sin embargo los adeptos o Discípulos espiritualmente desarrollados, rara vez suelen actuar en los mundos astrales, ya que su atención va más bien dirigida hacia el Plano mental, donde hay mayor claridad y exactitud de lo que se percibe. En cuanto al individuo vulgar, se le ve flotando vagamente en su cuerpo astral durante el sueño físico en más o menos inconsciente condición. Durante el sueño profundo, el ego (Alma) con el cuerpo astral se retira del físico y permanece en su contigüidad, pero si el individuo está muy poco desarrollado psíquicamente, queda tan inactivo como el cuerpo físico.
Sin embargo, en algunos casos, el cuerpo astral flota como en sueños a impulsos de las corrientes astrales y eventualmente reconoce a otros Egos en la misma condición y tiene ex-periencias agradables o desagradables, cuyo recuerdo irremediablemente confuso y a menudo trasmutado en grotesca caricatura de lo realmente ocurrido, es causa de que al despertar el individuo crea que tuvo un sueño muy extraño.
- La clasificación de los habitantes no humanos, es aun mayor que en la física, entra las que destacan ciertos “Elementales” o Espíritus de la Naturaleza, ciertas Jerarquías Dévicas o Angélicas, y seres procedentes de otros mundos, así como una gran variedad de entidades de muy diversa índole evolutiva.
El Plano Búdico o Intuicional.
- Numerológicamente el Plano Búdico es el cuarto Gran Plano de Nuestro Sistema Solar, siendo el número 4 el CENTRO o medio de los 7. Por lo que tenemos 3 inferiores (Físico, Astral y Mental), y 3 superiores (Átmico, Monádico y Divino) siendo el Plano Búdico el punto medio. Podría decirse también que simboliza el mistico corazon cosmico, y que a su vez tiene una oculta e íntima relación con el corazón humano, siendo este órgano analógicamente el centro del hombre.
- Este Plano, al ser el primero verdaderamente Superior no se puede hacer contacto con él, sino es a través de un riguroso trabajo de aceleración evolutiva, siendo los Iniciados de orden superior los que sí pueden acceder conscientemente a dicho mundo y hacer contacto y trabajar en él.
Esta es una de las razones por las cuales poco o nada se puede decir sobre él, salvo que su estructura es completamente diferente y mucho más sutil de lo que nos podamos imaginar. El Plano Búdico también es conocido como el plano "intuicional", pues en él, se capta las realidades virgenes de una forma natural, instantánea, intuitivamente, sin necesidad de utilizar el mecanismo mental para entenderlas o comprenderlas.
Por esa razón la intuición es un mecanismo muy espiritual y a la vez muy natural que utiliza el Iniciado avanzado para discernir inequívocamente sobre cualquier asunto. Esta intuición, a la que hacemos referencia, no es la misma que las corazonadas o las adivinaciones instintivas. La Intuición es el instrumento del Alma, por el cual se puede reconocer “la verdad más elevada”, directamente, desnuda, sin capas o velos, por lo tanto estamos hablando de un Poder o Cualidad de carácter Divino.
- Las Fuerzas y energías de dicho Plano son con las que trabajan los Maestros de Sabiduría. En el Plano Búdico la “unicidad”, la “unidad” es reconocida perfectamente y corroborada por la conciencia del Iniciado.
Es el Plano del amor puro, llamado curiosamente, en los escritos esotéricos “razón pura”, teniendo una relación íntima con el cuerpo o plano astral, el cual deberá a su debido tiempo, tras una larga depuración y transmutación, manifestar y reflejar como un buen espejo las cualidades más elevadas del plano búdico. El ser humano debe ser un buen canal de manifestación de dichas energías, cuando esto ocurra de una forma masiva, tendremos la demostración más solemne de la expresión “fraternidad” en el plano físico.
Aunque el tema es amplio y a la vez complejo, no deja de ser por ello bellamente revelador, mostrándonos a la inteligencia humana un panorama que hasta ahora ignorábamos, y aunque siga siendo para muchos, una “bonita teoría”, nos invita a descubrirlo personalmente. Porque lo que para unos es absurdo, para otras es muy cierto, reduciéndose todo a una cuestión de trabajo y observación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario